Rebajas sin tarjeta

Acaba de empezar el mes de julio… y eso solo puede significar una cosa: REBAJAS!!!

Los últimos meses de julio de mi vida han tenido un sabor agridulce por así decirlo. Llegaba el calor, las rebajas, la Fiesta Mayor del pueblo… y yo encerrada en casa estudiando! Así que cuando por fin me liberaba de los apuntes resulta que ya era demasiado tarde para todo: no había podido tomar el sol, la ropa y los zapatos en las tiendas estaban super escogídos y me había perdido todas las fiestas… pero este es el primer verano en mi vida en el que ya no tengo que presentarme a ningún examen, ni de primera convocatoria, ni de recuperación… No! nada de nada!! Y aunque también es el primer año en que trabajo en serio (de becaria pero horarios y vacaciones como los de todo el mundo y no los de una estudiante) eso no me va a impedir disfrutar de las rebajas….

Almenos eso es lo que pensaba hasta el sábado pasado porque… ME HE QUEDADO SIN TARJETA DE CRÉDITO, y con esta ya van 3 las que he usado en lo que va de año. No es culpa mía, lo prometo. O bueno, no sé, a lo mejor sí. Lo que pasa es que hace unos 3 meses no pude resistirme a un monedero-cartera que ví y me lo compré. Ya desde el principio supe que me iba a traer problemas porque tenía un imán muy cerca de donde hay que poner las tarjetas. Prové mil combinaciones y al final creí encontrar la posición exacta para que la tarjeta no estuviera cerca de la zona peligrosa pero… no funcionó. Con la tarjeta nueva tuve más cuidado y decidí llevarla fuera de la cartera, junto con la tarjeta del tren. Creía que lo tenía todo controlado pero me ha vuelto a pasar, se me a vuelto a borrar la tarjeta y no sé cómo ha podido pasar esta vez! Lo único que se me ocurre es que la cartera y la tarjeta, de alguna extraña manera, hayan estado en contacto dentro del bolso…

Sé que la única solución posible para que no me vuelva a pasar esto es dejar de utilizar esa cartera pero… es que es tan bonita… y además, si me la compré fue también por dejar de usar la anterior, que me traía muy mal rollo desde el verano pasado, cuando me la robaron. Pero eso es un tema aparte del que ya hablaré otro día. En fin, que no cambiaré de cartera por el momento así que tengo que seguir pensando en cómo solucionar el problema de la banda magnética.

En época de rebajas siempre recomiendan tener muy claro el presupuesto inicial para no despilfarrar. Viendo que no podré sacarle brillo a la tarjeta y que tendré que ir con el dinero en efectivo, pasaré las horas que me quedan hasta esta tarde de compras pensando en el presupuesto que necesito.